El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, distinguió ayer por la mañana con una placa a alumnos de la Escuela Santa Teresa del Niño Jesús (Rodríguez Peña 765, Martínez), por haber conquistado los primeros puestos en las Olimpíadas de Matemáticas realizadas en Mar del Plata, que tiene instancias regionales, provinciales y nacionales.
Entre más de 300 participantes, los tres ganadores de las Olimpíadas que empezaron meses atrás fueron Bruno Di Sanzo (primer puesto en la instancia nacional); Néstor Cairoli (segundo puesto en la instancia provincial); y Mathías Joel Suñé (primer puesto en la competencia Charito).
Rodeado de alumnos, Posse expresó: “Es una alegría enorme que los chicos que entrenan durante el año fuera del horario escolar se hayan convertido en campeones nacionales y provinciales. Por eso hoy los distinguimos con gran orgullo”.
El intendente destacó la labor de las escuelas como Santa Teresa del Niño Jesús, que entrenan a los chicos y los incentivan a participar de estas competencias en las que se fomenta la educación. “Uno no se imagina hasta dónde llegarán estos chicos, por eso de corazón les deseo lo mejor”.
La directora general de la Escuela, María Ofelia Lois, señaló: “Fuimos invitados por el intendente, ya que alumnos que participaron en diferentes niveles de las Olimpiadas Matemáticas obtuvieron premios y menciones. Le damos mucha importancia a este certamen, ya que es notorio cómo año tras año se incrementó el entusiasmo de los chicos por participar”.
Lois explicó que se trata de un proyecto institucional al que la escuela le da mucha importancia y en el que “los docentes ponen mucho trabajo para que los chicos avancen en este desafío”, resaltó la directora de este colegio que alberga a más de 800 alumnos y tiene más de 50 años de existencia.
Desde la Municipalidad de San Isidro, la directora general de Educación, María de los Ángeles Broggi, comentó: “Es un honor que estos chicos que asisten a una escuela del Partido de San Isidro hayan logrado este premio, por eso quiero felicitarlos, y destacar su habilidad mental y lógica que los llevó a ganar”.
La alegría de los chicos sobrevoló el despacho del intendente. Di Sanzo, de 11 años, alumno de quinto grado dijo sentirse feliz por la obtención del premio. El caso de Mathías Suñé es más que meritorio. Se trata de un chico no vidente de 10 años, que asiste a cuarto grado y participó en las Olimpíadas con una computadora portátil parlante y resolvió los ejercicios de geometría en braille. “Todavía no puedo creer que haya ganado este premio, me provoca mucha felicidad”, afirmó Mathías.
La misma felicidad expresó Cairoli, de 12 años, quien resaltó el esfuerzo que puso en conquistar el segundo puesto.
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